Cerca de 30 personas acudieron a la reunión convocada por el Ayuntamiento para explicar la situación de la Piscina Municipal de Kaputxinos en el centro escolar Beraun Berri el pasado jueves. En ella participaron el alcalde Julen Mendoza y Luisma Díez y Unai Unsuain, concejales de Urbanismo y Deportes respectivamente.
Díez explicó cronológicamente los problemas surgidos en las piscinas y que han provocado el retraso de su apertura: “el último día de apertura al público de la temporada del pasado año se reventó una válvula que produjo la inundación de la sala de depuración”.
El Ayuntamiento se puso, entonces, en contacto con la empresa Construcciones Sukia que fue la encargada de realizar la obra de las nuevas piscinas. Sukia, a su vez, había subcontratado el diseño del sistema a la empresa Aquamader.
La válvula en cuestión se puso en manos de una empresa de ingeniería para que la analizase y encontrar, así, el motivo del reventón. Finalmente se dictaminó que la válvula estaba en perfecto estado pero que el diseño del sistema no era el correcto.
Con estos datos el Ayuntamiento notifica a Construcciones Sukia la solicitud de reparación que ascendía a unos 120.000 euros pero la empresa se niega a realizar este trabajo por entender que las causas del siniestro no le son achacables. El Ayuntamiento decide llevar este asunto a los tribunales.
Ante esta situación, informó Díez, el Ayuntamiento asume provisionalmente el coste de la obra para asegurar la apertura de la piscina en verano e inicia el procedimiento de urgencia para contratar la reparación, que finaliza con la firma del contrato con la empresa Argy San el 29 de mayo. Ésta se comprometió a finalizar la obra en el plazo de un mes pero finalmente se retrasó 5 días. Sin embargo, actualmente la piscina cuenta ya con todos los permisos y funciona con normalidad.
Mendoza explicó que para la financiación de la obra se ha utilizado parte de la partida destinada para la construcción de los vestuarios de dicha instalación y por lo tanto, tendrán que aplazar más de lo previsto este trabajo.
Los vecinos y vecinas congregados, tras escuchar las explicaciones del retraso de la apertura, aprovecharon para plantear sus quejas y propuestas de mejora para la instalación. Los responsables municipales anotaron todas las sugerencias y se comprometieron a intentarlas solucionar, en la medida de lo posible, lo antes posible.
