• Este paso es, junto con las obras del aparcamiento que ya han comenzado, el último de muchos para recuperar el parque

El área del parque de Barandiaran del barrio de Pontika ha soportado durante décadas actividades industriales potencialmente contaminantes del suelo, según la normativa ambiental y el catálogo de suelos contaminados de Euskadi.

Es por ello que a lo largo de este año el Ayuntamiento de Errenteria ha realizado labores de análisis y caracterización del grado de contaminación del suelo en el actual solar.

Estos estudios han sido claves para solicitar a Gobierno Vasco la autorización para abordar la descontaminación integral del solar.

La autorización favorable y el inicio del expediente para la declaración de calidad del suelo fue recibida el noviembre de 2022.

Todo ello ha permitido abordar la retirada de un depósito de fuel-oil de unos 40.000 litros de capacidad, que se encuentra en mal estado y contiene unas cantidades significativas de hidrocarburos.

Además de la retirada de este depósito se realizarán las labores de descontaminación de hidrocarburos en el entorno y los análisis pertinentes. Los trabajos que durarán hasta el mes de enero de 2023, han sido adjudicados a la empresa Limia&Martin, SL por un importe de 44.421,58 €.

El parque, cada vez más cerca

Con la intención de agilizar los trabajos de descontaminación se ha redactado también paralelamente un plan de excavación que se ha basado en el diseño que tendrá el futuro parque.

En este sentido, cabe decir que durante este último año se han desarrollado diferentes acciones imprescindibles para la construcción del parque.

Concretamente se ha llevado a cabo el proceso para diseñar el futuro parque Barandiaran, se han hecho las catas necesarias para completar el estudio de calidad del suelo y conocer su estado actual y se han abordado dos intervenciones urbanísticas para generar plazas de aparcamiento. La primera, en el paseo de Arramendi, que ha permitido pasar a la zona de 12 aparcamientos a 25; la segunda en Pontika-Beraun Behera, con un presupuesto de 3.248.000 euros, que permitirá conseguir 183 plazas.

Todos estos pasos, junto con la descontaminación, sitúan al barrio en la antesala de que el parque sea una realidad.