La alcaldesa de Errenteria y la diputada foral de Infraestructuras Viarias han visitado las obras de instalación de pantallas acústicas en la GI-20, a la altura de Pontika y Beraun

Los trabajos para la instalación de las pantallas antirruido en la GI-20 a la altura del barrio de Beraun siguen su curso con la instalación de las correspondientes zapatas y soportes de la estructura, y con la previsión de que toda la actuación se encuentre completada para primavera de este mismo año. Concretamente, para el próximo mes de mayo, según ha adelantado la diputada de Infraestructuras Viarias, Aintzane Oiarbide, en la visita que esta mañana ha realizado junto con la alcaldesa de Errenteria Aizpea Otaegi con el objetivo de seguir de cerca el desarrollo de esta actuación. Esta es una intervención que considera “especialmente importante” al tratarse de “una zona de especial afección, donde viven cerca de 4.000 personas que, una vez finalizada la intervención, verán mejorada de forma sustancial su calidad de vida”.

El Ayuntamiento de Errenteria ha mostrado su satisfacción porque, según la diputada Oiarbide, las pantallas acústicas de la GI-20 de Beraun estarán instaladas para mayo. La instalación de pantallas reducirá la contaminación acústica por el tráfico rodado y mejorará significativamente la calidad de vida de las vecinas y los vecinos que viven en la zona.

Estos trabajos, que se iniciaron en septiembre de 2022 y se prevén finalizar en mayo de 2023, se enmarcan en el Plan de Acción contra el Ruido 2025 que está desarrollando la Diputación Foral de Gipuzkoa. Este plan contempla dos intervenciones en Errenteria. La primera intervención, a la altura de los barrios de Beraun y Pontika, en la carretera GI-20, está relacionada con las obras que se están llevando a cabo para instalar pantallas acústicas. Estos trabajos tienen un presupuesto de 1,9 millones de euros y la previsión es que 2.985 vecinos y vecinas se vean beneficiadas por la disminución del ruido.

La segunda actuación relacionada con el municipio está prevista para 2023 entre Errenteria y Oiartzun, en el cruce de la AP-8 con la GI-20, para proteger los barrios de Markola, Agustinas y Lartzabal. En esta zona hay 2.276 vecinas y vecinos que sufren niveles de ruido superiores a los aceptables. En este caso el presupuesto es de 425.000 euros.

La alcaldesa ha mostrado su satisfacción por el avance de los compromisos adquiridos por la Diputación en la reunión celebrada entre las dos instituciones en abril de 2021. Y es que, a pesar de que la instalación de pantallas acústicas para la reducción de ruido en ambas zonas estaba contemplada en el Plan de Acción de Ruido de la Diputación Foral de Gipuzkoa, antes de la reunión celebrada en 2021 no había concreción alguna sobre los plazos de las intervenciones.

Un tramo de más de un kilómetro

Los trabajos de colocación de las pantallas acústicas comenzaron el pasado 5 de octubre, en un tramo de 1,2 kilómetros de longitud que se extiende desde el viaducto de Arramendi hasta la salida 2, hacia el puerto de Pasaia y Errenteria. Se trata, en concreto, de una estructura metálica que cuenta, como característica destacada, con un diseño fonoabsorbente compuesto por una chapa perforada en la superficie exterior que da a la carretera GI-20. Ésta se encarga de absorber el sonido hasta una capa de lana de roca en el interior, donde gracias a este material, se parapeta el ruido generado por el tráfico. Según las mediciones en las que se basa en plan de acción, los vecinos y vecinas del entorno están expuestos a un nivel de ruido que supera los 55dB en horario nocturno.

Características y afecciones en la circulación

La estructura tiene una altura de 2 metros en el tramo del viaducto y alcanza los 4 metros en todo el tramo de 840 metros que afecta directamente al frente urbano del barrio de Beraun, en el borde de la carretera. Bajo el primer vano del viaducto también se levantará un pórtico de protección para el vial y la acera de la calle Arramendi y el camino peatonal. Una vez finalizada su instalación, se le sumará una intervención paisajística con el objetivo de integrar la estructura en el entorno.

Finalmente, como desde el inicio de los trabajos y para el correcto desarrollo de las siguientes etapas de la instalación, el carril derecho de la vía permanecerá cortado hasta la compleción de las obras en mayo de este año. De esta manera, seguirá colocada una barrera de seguridad rígida en todo el tramo afectado para garantizar la seguridad de operarios y conductores.