El cortafuegos que separa dos edificios que se encuentran en la calle Andre Mari -encima de la tienda de zapatos Boni- se ha agrietado.
Debido a ello se ha personado en el sitio bomberos, municipales y diferentes técnicos y representantes políticos municipales para realizar una inspección.
Si bien la estructura no tiene ningún problema y no acarrea riesgo alguno, la medianera que separa los dos edificios esta agrietada y tiene peligro de caída.
La policía municipal ha acordonado la zona y han puesto señales para que nadie se pare en las inmediaciones.
En este sentido, y con el objetivo de garantizar la seguridad, en los portales contiguos se han puesto diferentes notas informativas.
Mañana mismo la empresa que va a reparar la fachada de este edificio particular empezará a instalar los andamios para acometer la obra.
Desde el Ayuntamiento se pide a toda la ciudadanía que siga las indicaciones que la policía municipal ha puesto en las inmediaciones.