El Ayuntamiento de Errenteria participa en el proyecto europeo LIFE-Nature Kantauribai, para la mejora ecológica de la red fluvial Natura 2000 en el Golfo de Bizkaia

El pasado 25 de noviembre se presentó en el Parque Natural y Zona Especial de Conservación (ZEC) del Señorío de Bertiz (Oieregi) el proyecto LIFE-Nature Kantauribai, el cual tiene como objetivo la mejora del estado de conservación de especies y hábitats naturales vinculados al ecosistema fluvial en los ríos y afluentes que desembocan en el Golfo de Bizkaia. Liderado por Navarra, a través de la Sociedad Pública GAN-NIK, esta iniciativa contempla la demolición de 25 presas, entre ellas las de Ereñotzu (Hernani) y Artikutza (Goizueta), y la liberación de 85 kilómetros de cauces a lo largo de 5 cuencas fluviales compartidas entre las cuatro provincias: Oria y Urumea (Navarra y Gipuzkoa), Errobi y Urdazuri (Navarra, Lapurdi y Baja Navarra), y Bidasoa (Navarra, Lapurdi y Gipuzkoa).

En la presentación del proyecto participaron Itziar Gómez, Consejera del Departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente del Gobierno de Navarra; José Ignacio Asensio, Director de Obras Hidráulicas de la Diputación Foral de Gipuzkoa; Manuel Gutiérrez, Presidente de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico; Josu Benaito, Director de Medio Ambiente de Ayuntamiento de Donostia y Luis Sanz, Director Gerente de Gestión Ambiental de Navarra (GAN-NIK). Además, también asistieron, junto con el Ayuntamiento de Errenteria, a través de su departamento de Medio Ambiente, el resto de entidades socias, hasta un total de 13, que ejecutarán distintas acciones en el proyecto LIFE.

Se trata de una iniciativa necesaria para la preservación de la biodiversidad fluvial y la recuperación de la conectividad ecológica de los ríos, demasiadas veces troceados y artificializados con infraestructuras y obras hidráulicas hoy en día obsoletas.

El presupuesto total del proyecto asciende a 10.858.333 euros, con una cofinanciación de la Comisión Europea a través del Programa LIFE del 60% (6.514.995 €). Su ejecución se extenderá del 1 de octubre de 2022 al 30 de septiembre de 2027.

Liberación de 85 kilómetros de cauces

En concreto, LIFE Kantauribai busca mejorar la fragmentación de los ríos por la presencia de presas que conducen a un mal estado de conservación de las especies y hábitats a través de la restauración ecológica de la conectividad fluvial y la eliminación de las causas de mortalidad y aislamiento, como una forma de mejorar el estado de conservación de especies y hábitats vinculados al ecosistema fluvial en 15 espacios protegidos de la Red Natura 2000, una problemática que comparten los ríos de la cornisa cantábrica.

Para alcanzar dichos objetivos se van a acometer una serie de actuaciones, entre las que destacan la demolición de 25 presas que tendrá como efecto la liberación de un total de 85 kilómetros de cauces, 26 km de cauces principales (13 km en el río Urumea, 6 km en Oria y 7 km en Bidasoa) y 59 km en cauces secundarios (8,4 km en la cuenca del Urumea, 1’2 km en la del Oria, 33 km en la del Bidasoa y 17 km en el Urdazuri).

Entre las demoliciones destaca la presa de Arriurdineta, en el barrio de Ereñotzu (Hernani), donde el Ayuntamiento de Errenteria es propietario de la antigua central hidroeléctrica, fuera de uso y declarada en caducidad por la Confederación Hidrográfica del Cantábrico. Esta presa pública municipal, situada dentro de la Red Natura 2000, es responsable del aislamiento de las poblaciones piscícolas y demás fauna fluvial, entre ellas la del salmón atlántico o la anguila, ya que impide la migración longitudinal en su viaje desde el océano Atlántico hasta Goizueta, Leitza y Ezkurra. Asimismo, se contempla la permeabilización de otros 7 obstáculos cuya demolición no es posible para facilitar el paso de peces y demás fauna salvaje.

Otras actuaciones destacadas son la instalación de sistemas de control y seguimiento automatizado de las especies de peces migradores que permitan su monitorización con mínima intervención humana; la restauración y mejora de los hábitats naturales y los hábitats de las especies; la mejora del estado de conservación de la Margaritífera (mejillón fluvial) en los cauces incluidos en el proyecto a través de un programa de refuerzo de poblaciones y traslocaciones; y la mejora del estado de conservación de dos mamíferos (desmán ibérico y visón europeo) en los ríos incluidos en el proyecto, mediante la mejora de la conectividad de sus poblaciones (actuaciones de eliminación y permeabilización de obstáculos en el cauce y restauración de la vegetación de ribera), y mediante acciones directas para reducir las principales amenazas para los últimos núcleos de desmán y visón europeo.

Asimismo, el proyecto contempla el control y/o erradicación de las especies exóticas invasoras (visón americano, coipú, rata almizclera y distintas especies de flora) presentes en los ríos incluidos en el proyecto y que afectan directamente a la conservación de las especies y hábitats objetivo; así como la creación de un organismo que permita la coordinación internacional para la gestión y seguimiento de las especies de peces migradores entre estas cuatro provincias de Euskal Herria por las que discurre la cuenca del Bidasoa.

La ambición de este proyecto, además de por el presupuesto cercano a 11 millones de euros, se refleja en el número de socios y entidades asociadas que participan en cada uno de los territorios. Son los siguientes: GAN-NIK; Confederación Hidrográfica del Cantábrico; Diputación Foral de Gipuzkoa; Agencia Vasca del Agua-URA Agentzia; Ayuntamientos de Donostia y de Errenteria; Iberdrola; Centro Tecnológico Agrario y Agroalimentario (ITAGRA); “Conservatoire Dèspaces Naturels de Nouvelle-Aquitaine” (CEN NA); “Groupe de Recherche d’Etudes pour la Gestion de l’Environment” (GREGE); “Institut National de recherche pour l´agriculture, l´alimentation et l´environnement” (INRAE), “Scimabio interface”; y la Agencia EFE. Otras entidades asociadas al proyecto son el Ayuntamiento de Hernani, “Communauté d’agglomération Pays Basque”, “CPIE Seignanx et Adour” y la “Fédération des Pyrénées-Atlantiques pour la Pêche et la Protection du Milieu Aquatique”.

La ejecución de este proyecto LIFE contribuirá a la Estrategia sobre Biodiversidad 2030 de la Unión Europea, que pretende mejorar el estado o las tendencias de conservación de al menos un 30% de los hábitats y especies protegidos de la UE que en la actualidad no presentan un estado favorable y recuperar al menos 25.000 km de ríos.